Castrones, rebaños y veceras.

Ficha

Identificación
Castrones, rebaños y veceras.
Identificador del elemento de patrimonio inmaterial
PI2231
Localización
Comunidades, grupos, localidades o individuos involucrados
Comunidad local.
Dimensión geográfica del elemento
Funciones sociales y culturales del elemento patrimonial
La ganadería ha sido el gran recurso de las localidades de montaña de la Tebaida berciana durante cientos de años. Esta forma tradicional de producir alimentos y otros productos ha permitido la reproducción social a lo largo de los dos valles que componen que conforman este territorio. Esta forma de explotación ganadera se encuentra en relación estrecha con la estructura familiar que contaba con pequeños establos o cuevas donde recoger las cabezas del ganado así como una compleja relación tanto familiar como social para poder aprovechar los recursos naturales al máximo con el ganado. Destacaban sobre todo la presencia de ganado ovino y caprino, y también en muchos casos ganado bovino. De especial importancia ha sido la propiedad de los castrones por parte de algunas familias. Se consideraba como tal al macho cabrío de más de dos años utilizado como semental y gozaban de un gran valor tanto económico como también simbólico.
Medidas de salvaguarda y riesgo
En el momento en que la ganadería fue disminuyendo las prácticas y conocimientos asociados a este sistema productivo han ido desapareciendo, si bien se conservan de un modo fiel aún en la memoria de los habitantes de estos territorios.
Descripción etnográfica
En los valles de la Tebaida la ganadería ha sido el recurso fundamental por excelencia. Este modo de producción consistía generalmente en el llamado "Rebaño", es decir, el conjunto de ganado ovino y caprino, y además las llamadas "veceras" conformadas por el número de cabezas de ganado vacuno. Esta diferencia no se da en todos los lugares y refiere más bien a un uso local de estos dos términos.
Las veceras obligaban a un riguroso orden social en relación a su cuidado, y el número de ellas que había en cada localidad dependía de la cantidad de cabezas de ganado en cada momento. El primer domingo de junio se separaba de la vecera la pareja principal y las dos veceras quedaban entonces ya unidas en una sola.
El cuidado de estas veceras estaban firmemente regulado y sometido a un estricto control social. La referencia , tal y como se puede percibir en el audio adjunto, dependía del número de cabezas poseídas, por tanto, los que tenían un mayor número debían de ocuparse en mayor medida de la vecera que aquellos que contaban con menos.
Conjuntos de fichas
Fecha de creación
January 1, 2023
Fecha de modificación
January 7, 2023