Registro arqueológico en la zona y estudio de valoración de las posibilidades de los diferentes elementos arqueológicos para su integración en diferentes usos. Para ello se revisa la Carta Arqueológica (excluyendo los trazados de los canales romanos) y la integración de los nuevos hallazgos; evaluación de accesos (distancia a vías de comunicación, relación con rutas de senderismo ya existentes, etc.); evaluación de la situación actual: vegetación, alteraciones (naturales o culturales), potencialidad del registro y localización de cuevas (geolocalización y levantamientos topográficos incluidos).
Espigón rocoso limitado por dos arroyos (uno de ellos el de Manzanedo) que van a desaguar en el río Oza. El emplazamiento controla visualmente el valle del Oza aguas arriba de San Clemente de Valdueza.
El lugar exacto donde se ubicaba esta antigua ermita no es conocido. La toponimia (valle de Santo Tomé) lleva a situarlo en este pequeño valle próximo a la cueva de San Genadio.