Bienes históricos y artísticos
Conjunto de fichas
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- Descripción
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Bienes históricos y artísticos
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Colección de bienes históricos y artísticos de la Tebaida Berciana.
Fichas
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Ángel en pie 1
Esculturilla de niño desnudo, en pie y con paño rojizo que le cruza el cuerpo en diagonal desde el hombro derecho hasta la cadera izquierda. Se dispone en posición de avance y con los brazos en movida actitud. Su anatomía está bien resuelta y su cabeza, de facciones regordetas, luce larga cabellera rizada. -
Virgen con el Niño
La Virgen aparece en pie con el Niño Jesús reposando sobre sobre mano izquierda. Es de correctas proporciones y de buena talla, al gusto de las imágenes del último romanismo que pueden encontrarse en la zona. Ella viste túnica larga, ceñida a la cintura y que le cubre hasta los pies (que se asoman bajo los últimos plegados) y manto que que deja al descubierto el pecho pero que se cruza bajo él al agarrar al infante. Los plegados se tornan duros, aunque mantienen ese espíritu ampuloso de las décadas anteriores. Su rostro, alargado y de facciones limpias, esboza una ligera sonrisa y va tocado con una corona de talla, bajo la que se descuelga una larga cabellera de elaborado peinado. Por su parte el Niño se sienta en compleja postura, cruzando las piernas y con la espalda completamente erguida. Su cabeza resulta algo desproporcionada y su rostro más serio que el de la Madre. Bendice con la diestra, mientras sujeta el orbe con la contraria. También la Virgen debió llevar algo en su mano derecha, hoy sustituido por un ramillete de flores. Su policromía resulta interesante, con abundancia de dorados y sencillos estofados propios ya del siglo XVII. -
San Marcos y San Juan evangelistas
Pareja de evangelistas, sentados y en actitud de escribir. Ambos deberían ser reconocibles por su emblema en el Tetramorfos, pues el de la derecha se acompaña del águila que le identifica como San Juan. Pero junto al de la izquierda figura un extraño rostro con bigote, ojos saltones y cabellera corta y rizada, que desde luego no es el león que debería acompañar a San Marcos, santo que por descarte con su pareja debería ser. Son imágenes de elaboradas vestimentas, profusamente plegadas y aireadas, bien resueltas y que por su fisonomía encajan adecuadamente con el resto de imaginería original del retablo. -
San Lucas y San Mateo evangelistas
Evangelistas pareados, sentados y en actitud de escribir. Ambos son reconocibles por su emblema en el Tetramorfos. El de la derecha se acompaña del toro que le identifica como San Lucas y el la izquierda del niño o ángel que acostumbra a acompañar a San Mateo. Ambas imágenes resultan casi idénticas, como fruto del limitado repertorio utilizado por este escultor. Visten túnica, capa con cuellos, van descalzos y su rostro se caracteriza por una larga melena y poblada barba. Entre ambas emerge un árbol de ramaje partido en dos y entre ambas un tintero con una pluma. -
Templete añadido al tabernáculo del retablo mayor
Sobre el tabernáculo del retablo se dispuso en un momento indeterminado, pues no parece pieza original del retablo, una suerte de templete con función entendemos que de expositor. Se articula mediante cuatro columnas torneadas y un remate arqueado y abierto en tres de sus lados. Va cerrado por su trasera, donde, además, se pintó una custodia de tipo ostensorio en su fondo. En el intradós de su cubierta asoma lo que parece ser una florón de talla. Aunque muy perdida, parece que todo su estructura estuvo cubierta con una especie de jaspeado rojo y blanco. -
San Pedro
Pequeña esculturilla representando a San Pedro, identificado fundamentalmente por la gran llave que porta en su mano derecha. Dispuesta sobre el tabernáculo y haciendo pareja con San Pablo, son tallas sencillas, verticales y resolución bastante sumaria, aunque con una cierta intención en el trabajo de los paños. El santo muestra semblante serio, larga cabellera, pronunciadas entradas y barba corta. Su policromía aún se realizó a base de sencillos estofados. -
San Pablo
Pequeña escultura representando a San Pablo, identificado por la enorme espada que porta en su mano derecha y clava en la peana. Dispuesta sobre el tabernáculo y haciendo pareja con San Pedro, son tallas sencillas, verticales y resolución bastante sumaria, aunque con una cierta intención en el trabajo de los paños. El santo muestra semblante serio, larga cabellera y barba de mechones ondulantes. En su mano izquierda porta, además, un libro abierto. Su policromía aún se realizó a base de sencillos estofados y profusión de dorados. Por sus facciones se asemeja bastante a la figura del Dios Padre -
Tabernáculo del retablo mayor
Potente tabernáculo barroco dispuesto en el basamento de la calle central del retablo. Describe una forma casi rectangular, aunque con unos perfiles extraordinariamente movidos que se ponen de relieve en la composición de basamento y cornisa. Estas dos estructuras flanquean al cuerpo principal, articulado mediante cuatro columnas salomónicas y una serie de pilastrillas cajeadas y adornadas con colgantes de frutas. En el centro, rodeada por un marco mixtilíneo de jugosa talla se abre la puerta, en arco de medio punto y con el Agnus Dei tallado en su centro. Por lo demás, arriba y abajo, entre molduras, entrantes y salientes, todo va poblado de tarjas de hojas carnosas y prominentes, o de amplios florones. Todo él va dorado interior y exteriormente