Pieza formada por láminas longitudinales de hojalata burilada que revisten por completo el interior de una hornacina rematada con bóveda de cuarto de esfera, posiblemente un antiguo sagrario. La labor de buril repite motivos geométricos aplantillados (juegos de dos líneas onduladas que se entrecruzan y muestran una flor en los óvalos resultantes). En la parte superior, clave de bóveda, se representa entre fulgores la paloma eucarística.
Tres juegos emparejados de distintas alturas y modelos de planchas de latón recortado y burilado para semejar floreros, dos de ellos asentados sobre una plancha del mismo material y sostenidos por una pletina que los arriostra por su parte trasera, y un tercero dispuesto sobre sendas basas de madera moldurada. Algunos están policromados por entero con vivos colores, otros parcialmente (dejando la chapa en su color), y uno de ellos está sin policromar. Los jarrones son de avolutados brazos (salvo un juego, de brazos rectangulares) y en los ramos destaca siempre una gran flor central.
Se compone de basa (zócalo y toro, el primero embutido en el pavimento), pie (un fuste troncocónico) y vaso liso, en forma de media esfera con resalte para la embocadura. Conserva los herrajes para anclar la tapadera, así como para la tapa del desagüe (tapón, largo vástago y argolla achatada), y la propia tapadera de madera.
Sencillo tenebrario compuesto de basa con cuatro patas unidas por una cruceta que arriostran el pie, un palo circular. Sostiene la estructura triangular que conserva los agujeros donde se instalaban los candeleros de latón, alguno superviviente.
Pletina curva de hierro rematada por un gancho en un extremo, y en el otro por cordón férreo para atar dos piezas también de hierro, una doblada en ángulo para golpear con un trozo de hierro en el interior para otorgarle peso.
Campana de perfil esquilonado. En el tercio, entre dobles cordones arriba y abajo, muestra la inscripción IHS y AÑO 1711, con letras romanas mayúsculas, y decoración de moldes cuadrados. En el medio exhibe una cruz de calvario de moldes cuadrados con estrellas de ocho puntas, y brazos rematados en cruz con moldes girados. El Gólgota se construye con moldes de cuatro estrellas de ocho puntas en tres alturas. Su medio pie se adorna con tres cordones.
Un bastidor formado por cuatro montantes de hierro (rematados por sendos pináculos con bolas) ensamblados entre sí por pletinas también férreas en su parte inferior y superior, que suman otras dos en sus laterales, acogen el mecanismo del reloj que se hizo en 1730 y estuvo en la torre hasta finales de la segunda década del siglo XXI. Dicho mecanismo se compone de un tren de rodaje compuesto de seis ruedas dentadas, cuatro de ellas emparejadas a los ejes que accionan cada una de sus dos pesas. Todo el mecanismo es de forja. Las pesas son dos piedras. El reloj, una vez bajado de la torre, se exhibe sobre una estructura de madera realizada en 2018.